Las
fuentes de financiación depende de los siguientes cosas, entre otras:
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Sus objetivos.
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Sus actividades.
-
Etc,.
Por
ejemplo, las asociaciones de ámbito local no cobran subvenciones
estatales.
Hay
que tener en cuenta que las asociaciones buscan un beneficio social y no un
beneficio económico.
Pero
aunque no son empresas, hay cosas que se pueden coger de las mismas y
aplicarlas en las asociaciones, como son:
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Formación en gestión económica
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Llevar una contabilidad ordenada y al día.
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Llevar unas partidas presupuestarias y no una “caja común” para todos los gastos e ingresos. Para eso hay que fijar las prioridades prioritarias en base a los objetivos que se quieren conseguir.
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Distinguir entre resultados económicos y liquidez. Porque cada problema tiene una solución distinta.
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Y por último, y muy importante, Diversificar las fuentes de financiación.
Además
se debe tener en cuenta que para tener una economía sana implica:
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Al menos un 30-40% del presupuesto, cubierto con recursos propios.
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No superar el 50% con subvenciones.
- Que el no haya más del 20% del presupuesto proveniente de una sola empresa, fundación o administración.
Esto
se debe está basado en lo siguiente:
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La mayor o menor importancia de los recursos propios nos indica el mayor o menor respaldo social con que cuenta nuestra asociación.
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Una dependencia excesiva de la Administración hace que nos alejemos de nuestros objetivos porque hace que terminemos haciendo proyectos que encajen en las convocatorias de subvención más que en lo que nos hubiésemos planteado.
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Depender excesivamente de una entidad, ya sea una empresa, fundación o administración, hace que someta a la asociación a sus criterios y nos deja en sus manos la continuidad del proyecto. Es decir, si un proyecto de la asociación depende de una única entidad si la misma deja de darnos subvenciones, ese proyecto se interrumpirá, mientras que si depende de varias, si una de ellas deja de subvenciones, el proyecto puede continuar gracias al dinero aportado por las otras.
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Cuando más personas, empresas, organismos, etc. aporten recursos a la asociación, menor será la posibilidad de que todas se pongan de acuerdo para dejar de subvencionarla. Si esto ocurre querría decir que no tenemos suficiente respaldo social.
En
los próximos artículos ahondaremos en los diferentes apartados de
los presupuestos. Espero de nuevo que os haya gustado. Y Feliz
Navidad.
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